
El jengibre fresco es un ingrediente fácil de encontrar hoy en día, se puede comprar en casi cualquier supermercado o herbolario. Puedes leer como mezclarlo con otras especias en nuestro artículo sobre el maridaje de sabores aquí. Pero, aparte de usarlo como ingrediente en recetas, lo puedes infusar para una bebida fría o caliente que te ayudará con la digestión, nausea o incluso a ayudar tu sistema inmunitario.
- Lavamos bien la raíz de jengibre. Podemos usar un cepillo de cocina para eliminar cualquier traza de tierra y suciedad.
- Cortamos el jengibre en rodajas finas.
- En una cacerola ponemos a hervir el agua.
- Cuando empiece a hervir, añadimos el jengibre. Bajamos la temperatura y dejamos a hervir a fuego lento - 10 minutos.
- Colamos el liquido en una garrafa y añadimos un poco de zumo de limón exprimido o limón en rodajas.
- Se puede servir como bebida fría con un cubito de hielo. Para los que prefieren bebidas dulces, se puede añadir una cucharadita del edulcorante preferido: jarabe de arce, agave, azúcar de caña o de coco, etc.
Si no te gusta el limón, lo puedes cambiar por uno de los siguientes ingredientes:
- un poquito de canela
- unas hojas de menta
- un poco de cúrcuma fresca para los amantes del picante